Lo bueno de una escuela pequeña es que hay un apoyo muy personalizado a los estudiantes. En Brillantmont, nuestra visión y misión están en el centro de lo que hacemos, ya que ayudamos a los estudiantes a alcanzar su máximo potencial en nuestro programa británico IGCSE y A Level y nuestro diploma de escuela secundaria.

Objetivos de aprendizaje claros

Los estudiantes saben lo que necesitan estudiar ya que los profesores definen claramente el contenido cubierto, los objetivos académicos, la metodología y el sistema de calificaciones. Es fundamental que los estudiantes comprendan dónde se encuentran académicamente y que puedan buscar más apoyo si es necesario.

Clases pequeñas

En Brillantmont, el tamaño promedio de las clases es de 9 estudiantes, sin embargo, algunas clases de 11.º y 12.º grado pueden tener entre 5 y 6 estudiantes, ya que no todos optarán por las mismas materias. Estas clases pequeñas facilitan la atención personalizada, fomentando un ambiente propicio para el compromiso y la participación activa de los estudiantes. Esto permite a los profesores adaptar su enfoque, abordar las necesidades individuales y crear una experiencia de aprendizaje más interactiva y centrada en el estudiante.

Construyendo confianza

Las clases pequeñas generan confianza en los estudiantes simplemente porque el entorno de aprendizaje es más colaborativo. En consecuencia, los estudiantes se sienten más cómodos y menos expuestos al compartir sus pensamientos e ideas que en una escuela más grande.
Los maestros de Brillantmont apoyan a los estudiantes a través de atención personalizada y retroalimentación periódica, fomentando un ambiente de aprendizaje colaborativo.

Objetivos de aprendizaje claros

En cada clase, los estudiantes saben lo que necesitan estudiar ya que los profesores definen claramente el contenido a cubrir, los objetivos de aprendizaje, la metodología y el sistema de calificaciones. Es fundamental que los estudiantes comprendan dónde se encuentran académicamente y que puedan buscar más apoyo si es necesario.

Ciudadania global

Dentro de nuestras clases, los estudiantes se convertirán en ciudadanos globales. Aprenderán a trabajar juntos, utilizar diferentes idiomas, aplicar perspectivas variadas y desarrollar conciencia y sensibilidad cultural. Aprenderán a cuestionar, desafiar y convertirse en pensadores críticos e independientes. Estarán preparados para el mundo que cambia rápidamente en el que vivimos.

Uniendo los puntos

La vida en el internado no se trata sólo de lo académico; más bien, es toda la experiencia la que ayuda al estudiante a crecer y aprender. Internamente utilizamos un sistema llamado “cartera”. Esta notable herramienta, desarrollada por nuestro Jefe de Internado, nos ayuda a apoyar plenamente al estudiante a diario. Nos permite monitorear todos los aspectos de la vida escolar, como identificar rápidamente cuándo un estudiante necesita apoyo adicional, emocional o académicamente, fomentar la participación en actividades escolares y celebrar el buen trabajo, la participación activa y los logros.